Desde la época de la Revolución Industrial, los humanos hemos comenzado una explotación desmedida de los recursos naturales, pues desde entonces el uso de energías contaminantes ha incrementado de forma exponencial y de igual forma la producción de gases de efecto invernadero. Actualmente estamos viviendo las consecuencias de dichas acciones las cuales vemos reflejadas en sequías, extinción de distintas especies y muchos otros factores que no siempre son visibles para todas las personas, por esa razón se decidió implementar el Día de la Sobrecapacidad de la Tierra.

Esta es una fecha simbólica que representa el momento en que el ser humano ha utilizado todos los recursos naturales que la Tierra teóricamente es capaz de regenerar en ese año. La fecha se comenzó a conmemorar en 1970 y desde entonces se ha presentado cada vez más pronto, solamente retrasó un par de semanas en 2020 y fue debido a los paros de actividades ocasionados por la pandemia.
Lo que nos deja ver claramente y sin más dudas que somos los responsables de todos los cambios, por lo tanto está en nuestras manos transformar el futuro. Uno de los principales problemas a resolver es el de la generación de energía.
Por suerte la atención en las fuentes responsables es cada vez mayor y grandes las grandes empresas están apostando por ellas, sin embargo el usuario particular también puede poner su granito de arena y para ello cuenta con sistemas de autoconsumo, los cuales son herramientas que nos permiten aprovechar las fuentes de energía limpias con una generación mínima de residuos.
Los recursos más utilizados para alimentar estos sistemas son el eólico y el solar, una gran ventaja para países en América Latina pues suelen contar con grandes espacios abiertos y muchas horas de sol al día. Algunos de los principales beneficios que podemos encontrar en este tipo de energía son los siguientes:
Electricidad y calefacción limpia.
Algunos de los procesos actuales para generar electricidad y extraer gas de la naturaleza son altamente contaminantes, sin embargo ambos elementos son indispensables para la vida de las personas. Sin embargo al instalar un sistema que utiliza energías renovables es posible alimentar los electrodomésticos o calentar agua sin generar apenas contaminación.
Ahorro económico.
Una vez instalado el sistema y dependiendo de su capacidad de generación, los usuarios pueden desconectarse totalmente de las compañías proveedoras de electricidad, por lo que mes a mes solo cubrirán los gastos de mantenimiento del equipo, pues en muchos países los gobiernos han apostado por retirar los impuestos a estas energías para fomentar su uso.
Ingreso pasivo.
Una vez más dependiendo del tamaño de la instalación, es posible obtener un beneficio económico, ya que si producen más energía de la que necesita la persona que la instaló, puede vender el restante a través de empresas distribuidoras.
Tecnología como aliado.
La tecnología y en este caso el internet se convierten en herramientas importantes, pues gracias al análisis y envío de grandes cantidades de datos, se han podido crear mapas de radiación que nos ayudan a determinar si es rentable instalar estos sistemas. Pero además también nos ayudan a conocer el ahorro que generan y a optimizar su uso, esto se logra a través de la conexión inalámbrica de distintos objetos como sensores, brazos robóticos y paneles solares, logrando que estos últimos puedan moverse de forma automática siguiendo la luz del sol a lo largo del día, por lo que tener una buena conexión a internet va a ser aún más importante y útil que nunca.
Estas son solo algunas de las ventajas, pero debemos tener en cuenta que como en todos los sectores, un uso excesivo e irresponsable puede ser perjudicial, por ejemplo, si no se controla la producción y desecho de baterías y celdas solares, se pueden convertir en la siguiente amenaza para el planeta.
Todos podemos colaborar a cambiar la mentalidad colectiva, pues cuidar al planeta no significa que debamos sacrificar nuestra comodidad, simplemente debemos encontrar un punto de equilibrio donde se trate a los recursos naturales con respeto.