Un gobierno estatal australiano se ha convertido en el primero en el mundo en implementar un programa de cámara para detectar automáticamente a los conductores que usan sus teléfonos celulares. El programa comenzó su implementación en el estado de Nueva Gales del Sur el 1 de diciembre. Tras un período de pruebas, según el gobierno, se detectaron a más de 100.000 conductores haciendo uso de sus móviles al conducir.

Tampoco habrá señales que indiquen la presencia de las cámaras. «Desafortunadamente, tenemos que usar el elemento sorpresa para que la gente piense: ¨bueno, podría ser atrapado en cualquier momento»», dijo el ministro de caminos de NSW Andrew Constance. «Quiero que el comportamiento cambie y quiero que cambie de inmediato».
Las cámaras de detección de teléfonos celulares no pueden identificar a las personas que usan sus teléfonos en tiempo real. En cambio, toma fotografías de cada vehículo a través de su lente, utilizando inteligencia artificial para analizarlos más tarde. Si el software detecta un posible delincuente, la imagen es verificada por un empleado antes de que se envíe un aviso de penalización.
Sanciones
Los conductores solo recibirán advertencias durante los primeros tres meses de funcionamiento de las cámaras de detección de teléfonos celulares. Después de eso, los conductores que sean atrapados incurrirán en una multa de $ 344 ($ 457 en zonas escolares). También perderán cinco puntos de demérito de su licencia de conducir.
Según el gobierno de NSW, «existen controles estrictos para garantizar que las imágenes capturadas por el sistema se almacenen y administren de forma segura». Si la IA no detecta ningún uso sospechoso del teléfono en una foto, se elimina sin que ningún humano la vea. Generalmente se elimina dentro de una hora si no detecta nada.
Si la IA detecta el uso potencial del teléfono pero no puede ser verificada por un humano, la foto se elimina dentro de las 48 horas.
Como muchos grupos han criticado en el país, esto podría llevar a un precedente peligroso, ya que la ley en el país dice que:
Cualquier objeto que sostenga un conductor fotografiado se presumirá que es un teléfono móvil en poder del conductor a los fines de un delito de uso del teléfono móvil.
Dicho de otra forma, los conductores siempre tendrán que demostrar que el objeto que estaban utilizando no era un teléfono, luchando así contra una presunción de culpa en lugar de inocencia.