La fiebre por los autorretratos podría ser el responsable oculto detrás del incremento en el contagio de piojos entre los alumnos de secundaria de Holanda. Así lo revela un estudio del Instituto holandés de Salud Pública y Medio Ambiente. Según el informe, 28 % de los alumnos en la escuela primaria y 19 % de los que cursan secundaria en Holanda tiene piojos.
Una especialista en estos parásitos declaró a una televisora holandesa que cree que la razón de este incremento en el contagio de piojos entre adolescentes es producto del comportamiento de los estudiantes de secundaria. Asegura que hay muchos abrazos entre ellos y cuando se hacen selfis, el pelo de los jóvenes entra en contacto con el de los demás. Y es que para tomarse un selfie grupal los participantes tienen que chocar sus cabezas para salir todos en la foto; si una de las personas tiene piojos, existe un riesgo elevado de que “se los pase” a los demás.
El estudio, realizado entre 2.000 voluntarios, también confirmó que tres cuartas partes de las infecciones por piojos se producen en los cabellos de las niñas, habitualmente más largos que los de los niños. Además, el Instituto holandés de Salud Pública y Medio Ambiente detectó que uno de cada diez adultos tiene piojos en su cabeza. Lo que nunca imaginaron estos diminutos insectos es que los teléfonos inteligentes y la moda de los sefies, se convertirían en aliados tecnológicos para su propagación.