La industria de telecomunicaciones requiere de una permanente inversión en dólares para poder mantener la oferta de servicios de calidad. Sin embargo, el rezago en las tarifas, la deuda en moneda extranjera con sus proveedores internacionales y el vandalismo contra los equipos hacen que cada día sea más difícil la prestación de los servicios de Internet, telefonía móvil y televisión por suscripción, aseguró Ricardo Martínez, presidente de la Cámara de Empresas de Servicios de Telecomunicaciones.
Se calcula que la demanda anual de divisas para mantener las operaciones es de entre 1 millardo y 1,5 millardos de dólares porque amerita gran cantidad de componentes importados, pero desde 2013 las empresas del sector no reciben liquidaciones en moneda extranjera del Centro Nacional de Comercio Exterior.
De estar Venezuela en el año 2007 a la vanguardia en tecnología entre los países de Latinoamérica, pasó a tener el Internet más lento, dejó de ofrecer el servicio de roaming a usuarios de telefonía móvil y están limitadas las llamadas internacionales a solo algunos países como consecuencia de la desinversión. “Una industria que no invierte se muere, y más rápido si es de tecnología”, aseguró el especialista en telecomunicaciones José María De Viana, ex presidente de Movilnet.
El rezago es inmenso, señaló De Viana. En la mayoría de las ciudades de América Latina la velocidad de Internet alcanza 10 megas, mientras que en Venezuela es de 2,1 megas y el promedio de velocidad Cantv se sitúa en 1,7. En telefonía móvil la región utiliza 5G. Sin embargo, Digitel y Movistar ofrecen 4G en algunas ciudades; y Movilnet, que tiene la mitad de los usuarios del servicio en el país, opera con tecnología de segunda generación, CDMA. “La mitad de los cliente de telefonía móvil utiliza tecnología de hace siete años, que en el mundo se usa muy poco”, enfatizó De Viana.
De Viana explicó que el problema se genera con la estatización de la Cantv y el deterioro que experimentó en los años siguientes la empresa más grande del sector, propietaria de la mayor red de fibra óptica y principal proveedora de servicio a la industria. “Cantv y Movilnet representan la mitad del mercado y cuando el Estado tomó el control se quedó con las industrias vanguardia del sector”, dijo.
En los siguientes 9 años la situación se ha ido agravando y, además, las empresas se descapitalizaron de talento. “Se perdió la mayor parte del capital humano. La mayoría de los ingenieros se fueron a Centroamérica y el Caribe cuando el gobierno implementó la política de equidad social y los empleados pasaron a ganar el mismo salario sin que se considerara la formación académica y experiencia”, aseveró De Viana.
Otro gran problema que afrontan las operadoras es el vandalismo y el hurto contra sus estaciones. Entre enero y octubre 331 estaciones solo de Movistar han sido blanco de hurtos, algunas de estas más de una vez. Contabilizan 578 hechos vandálicos, 154% más que en igual lapso de 2015, cuando registraron 228. La consecuencia es que 1,5 millones de usuarios se han visto afectados. La empresa señala en un reporte que de las 2.602 estaciones que tiene, 41 no están operativas debido a que no se han podido recuperar por completo debido a la escasez de repuestos y otras 5 operan parcialmente.
Origen: Falta de dólares desacelera velocidad de navegación en Internet y conexión móvil