Durante la época de vacaciones de fin e inicio de año, muchas familias salen a recorrer las carreteras del país en sus motos y carros. Acostumbran a recorrer largos trayectos, exigiendo al máximo no solo a los vehículos, sino también a los accesorios y, en especial, a las llantas. Por eso debe estar en óptimas condiciones para lograr viajes seguros y confiables. Además, el cuidado de los neumáticos es tan importante como realizar revisiones periódicas al motor o a otros sistemas de un auto o una moto, ya que constituyen un punto de seguridad del vehículo que protegerá las vidas de quienes salen de viaje.

Frente a todo lo anterior, Pirelli ha preparado estos 5 tips para emprender viajes y trayectos seguros sin importar las distancias:
1. Presión y desgaste
Ante un viaje largo, lo primero que se debe revisar es la presión e inflado de las llantas según las recomendaciones de fábrica del vehículo. Esto se debe a que el vehículo cargará más peso por los pasajeros y el equipaje. Por ello, nunca se debe reducir la presión del neumático antes de salir, porque la presión normalmente aumenta por causa del calentamiento. En el caso de las motos, se debe calibrar la presión de acuerdo con la carga y el número de pasajeros, según el fabricante de la moto.
Así mismo, se deben calibrar todas las llantas una vez por semana, de acuerdo con la presión recomendada en el manual y siempre en frío para evitar problemas de estabilidad durante el recorrido.
2. Balanceo y alineación
Efectuar el balanceo de las cuatro o las dos ruedas y alinear el carro cada 10.000 kilómetros, cuando se haga cambio de llantas o si se sienten vibraciones en el volante es primordial para mantener la seguridad durante el viaje. En motos de alto cilindraje el balanceo es fundamental para lograr una conducción confortable.
Además, cambiar los neumáticos de posición cada 10.000 kilómetros de acuerdo con las recomendaciones del manual y de acuerdo con lo que indique la banda de rodamiento al llegar al punto indicado TWI (Thread Wear Indication).
3. Golpes y averías
Es recomendable hacer una revisión detallada del estado exterior de las llantas porque cualquier golpe, chichón, ralladura, corte, desgarro o similares es una clara señal de alerta para el cambio de estas debido a un uso excesivo, desgaste de los componentes o de la pared de las llantas. Cambiar a tiempo las llantas evitará accidentes y salvará vidas. Más allá de la calidad en la fabricación, estas tienen una vida útil que no se debe exceder.
4. Precaución al contacto con objetos y fluidos externos
Es recomendable evitar estacionar el vehículo (auto o moto) sobre manchas de aceite o solventes, ya que esto puede dañar las llantas o dejar residuos de elementos extraños en los neumáticos que pueden afectar su funcionamiento en frenadas o a altas velocidades.
5. El estilo de conducción y la vida de la llanta
Frente a un cambio de llantas antes de un viaje largo, la recomendación inicial es que durante los primeros 200 kms no se debería andar a altas velocidades, sino a una velocidad promedio y con mesura.
Además, verificar con antelación la ruta y el tipo de suelo que se va a recorrer pues con llantas especiales para pista (en las motos) los terrenos destapados pueden ser exigentes y dejar averías en la llanta. De igual forma, cuando se pasa de terreno destapado a asfalto es importante detenerse unos minutos a revisar el estado (limpieza) de la llanta para confirmar que el desempeño será el adecuado.
“En este tipo de viajes es muy importante utilizar llantas con buena adherencia a piso mojado, que soporte altas y bajas temperaturas y que soporte la exigencia del recorrido y verificar la limpieza y estado de las llantas cada vez que salgo de terrenos destapados”, explica Santiago Combariza, Key Account Manager para Pirelli en Colombia.