La formación estelar es uno de los campos de estudio más importantes de la astrofísica. Este proceso, en el que las inestabilidades gravitatorias provocan el colapso del gas para formar primero estructuras más compactas y finalmente estrellas, abarca un extenso rango de escalas físicas, desde las galaxias con formación estelar,hasta las estrellas jóvenes.
En un trabajo recientemente publicado en la revista Astronomy & Astrophysics y liderado por el investigador del Centro de Astrobiología (CAB,CSIC-INTA) Ignacio Mendigutía, los autores han descubierto una única correlación entre los datos compilados que abarca ¡16 órdenes de magnitud! y relaciona escalas físicas muy diferentes: estrellas jóvenes individuales, nubes moleculares y galaxias. Los investigadores sugieren una hipótesis «de abajo hacia arriba» (bottom-up, en inglés) para explicar este descubrimiento y proponen nuevas observaciones para confirmarla.
De acuerdo con esta hipótesis, la correlación hallada para las nubes moleculares se debería a las estrellas individuales que estas contienen; y la correlación hallada para las galaxias se debería a las nubes moleculares que albergan (y que podría, en último término, ser explicada también en términos de estrellas).
Fuente: UCC-CAB Documentación adjunta a la noticia: Centro de Astrobiología