En pocos años la mayoría de los puestos de trabajo de todo el mundo serán absorbidos íntegramente por la robótica y la inteligencia artificial. Sin embargo esta tendencia aparentemente irreversible ha sufrido un revés en Japón. En ese país, un hotel despidió a más de 240 robots por hacer mal su trabajo, entre ellos un par de dinosaurios recepcionistas.

El “inquietante” hotel Henn-na con sede Nagasaki, Japón, desincorporó un gran lote robots después de que comenzaron a estorbar más que ayudar. Por no cumplir correctamente con sus responsabilidades estos robots comenzaron a generarles más trabajo a sus colegas humanos, y esa no era la idea. Entre los robots desincorporados están unos asistentes con forma de muñecos colocados en cada habitación llamados Churi.
Se suponía que cada Churi ayudaría a los huéspedes a planificar su estadía respondiendo preguntas sobre las atracciones locales. Sin embargo, Churi tuvo dificultades incluso para responder solicitudes simples como “¿A qué hora abre el parque temático?”.
Otros robots despedidos fueron los recepcionistas velociraptor que tenían la intención de saludar a los invitados y ayudar con el registro, pero los robots no pudieron fotocopiar manualmente los pasaportes de los huéspedes, un requisito indispensable para registrarse en un hotel japonés. Sus tareas entonces estaban siendo asumidas por los humanos, haciendo así inútiles a las máquinas programables.

Otro ejemplo es el de los robots porta equipajes, que solo podían acceder a 24 de las 100 habitaciones del hotel y dejaban de funcionar si el clima no era adecuado.
Este hotel japonés se describe a sí mismo como “el primer hotel del mundo atendido por robots”. Desafortunadamente, estas máquinas no estuvieron a la altura de sus asignaciones. No queda claro si el hotel remplazará su población de robots o si preferirá la «manera tradicional» es decir, optará por contratar seres humanos.