La industria alimentaria siempre está innovándose y experimentando con nuevas técnicas para producir las comidas. En los últimos años, la impresión 3D ha sido aprovechada por empresas como Nova Meat y Redefine Meat para generar carne tridimensional, respetando las características esenciales de la carne original. La idea principal es llegar a reemplazar el consumo de la carne animal por una con más beneficios para la salud.

Aunque la impresión 3D era mayormente empleada de manera lúdica, en la actualidad forma parte de una serie de proyectos alimentarios bastante innovadores. La producción de carne en 3D ya es una realidad. Aunque todavía no está siendo comercializada, algunos célebres restaurantes veggie ya se han contactado con las empresas Nova Meat y Redefine Meat para saber más de sus iniciativas.
No obstante, la pregunta clave es: ¿Qué tan nutritiva es la carne impresa en 3D?
Corregir lo negativo de la carne original
La carne posee un valor nutricional entre 16 % y 22 % de proteínas de elevado valor biológico por cada 100 gramos, según informa Katrine Rubæk del sitio web Sundt. ‘’También es rica en fósforo, hierro, niacina y vitamina B12. Sin embargo, su aspecto negativo radica en su excesiva carga de ácidos grasos saturados y en el poco contenido de vitaminas A y C, además de ácido fólico’’, detalla.
Lo que Nova Meat y Redefine Meat pretenden es desarrollar carne 3D que, sin perder la textura, la apariencia y los beneficios nutricionales de la original, pueda suprimir estos aspectos negativos.
La española Nova Meat ha conseguido parcialmente este propósito a base de arvejas, algas y arroz. La ubicación de estos ingredientes de forma cruzada y a muy pequeña escala facilita que quepan en los filamentos que tiene toda impresora 3D. Luego, se diseña un corte semejante al de la carne común. Según informa la BBC, esta fase ha sido exitosa.
Por su parte, la israelí Redefine Meat opta por otra estrategia: hacer dicho proceso de impresión a base de proteínas, grasas y agua. Los portavoces de la empresa oriunda de Rehovot aseguran haber llegado a una fase en que su producto cárnico en 3D «es muy bueno y sabroso, pese a no provenir de animales».
Deficiencias para la cocción
No debe olvidarse que, más allá de una agradable textura o de una presentación convincente, lo que se espera de la carne impresa en 3D es que albergue las condiciones necesarias para ser consumida.
Lamentablemente, esta carne todavía no puede considerarse como una propuesta nutritiva para las personas porque presenta dificultades en los procesos de calentamiento y cocción. Los especialistas de Nova Meat y Redefine Meat han coincidido en que, precisamente, esta es la parte más compleja de la impresión 3D de alimentos. Por más que se empleen beneficiosos ingredientes (como proteínas, fibras y aceites) para generar la carne artificial, esta no será apta para ingerir mientras no pueda someterse a los procedimientos básicos de la cocina.